Nabila Rifo: Esperanza de una nueva vida
Contactamos a Nabila a comienzos de este año, luego de que su nombre apareciera en algunos medios digitales por un video que compartió, donde denunciaba el no cumplimiento de la justicia con su caso y el “abandono” que había sufrido por parte del Estado chileno. La indemnización que debía recibir por parte de su ex pareja nunca llegó, y los compromisos que habían hecho funcionarios del gobierno de turno cuando su historia fue tristemente conocida por todo el país, se diluyeron en el tiempo.
Nos contó que su pensión apenas alcanzaba para cubrir los gastos de sus 4 hijos, que quería aprender braille, conseguir unas prótesis definitivas para sus ojos (las que tenía eran provisorias), dejar de depender tanto de los demás y en lo posible mudarse a Santiago, a iniciar una nueva vida.
Inició su propia campaña de crowdfunding en BuenaCausa y nos propusimos que su historia resonara lo más posible. Sabíamos que había mucha gente dispuesta a ayudarla y en base a eso desarrollamos una completa estrategia de medios.
La campaña estuvo al aire un poco más de 2 meses. Durante ese tiempo conseguimos entrevistas en medios como la Tercera y varias menciones en distintos programas. Un primer logro fue que a raíz de este ruido mediático Editorial Planeta desestimó la publicación de un libro basado en la historia de Nabila. Luego, en un viaje a Santiago logramos conseguirle una extensa entrevista en The Clinic y otra en el programa “Mentiras Verdaderas” de La Red. Durante la emisión de esta última, estaba presente en el estudio el senador José Manuel Ossandón, quien se contactó con un representante del departamento de Salud de Aysén y consiguió rápidamente unas prótesis definitivas para Nabila.
Cuando terminó la campaña, Nabila había logrado juntar poco más de 2 millones de pesos. Tenía perspectivas reales de conseguir un departamento en Santiago, iniciaba un tratamiento para que le pusieran sus prótesis definitivas y seguía soñando con comenzar una nueva vida.
A pesar de toda su historia, algo de esperanza asomaba gracias a la ayuda de todas las personas que desinteresadamente quisieron hacer una diferencia en su vida. Y aunque no llegamos a la meta, quedamos satisfechos de ver cómo la comunicación bien dirigida por una BuenaCausa crea un círculo virtuoso que hace que la ayuda finalmente llegue de maneras a veces insospechadas.